Silvia Ros, es educadora social y coordinadora de la comunidad terapéutica Llaurant la Llum (un lugar en el que los alumnos del máster pueden hacer prácticas de rehabilitación) e hizo el máster en educación y rehabilitación de conductas adictivas el curso 2008/2009. Hemos hablado con ella.
Silvia, ¿desde cuando funciona Llaurant la Llum y cuanto tiempo llevas al frente del equipo?
Llaurant la Llum se creó hace casi 25 años, llevo trabajando como educadora 17años, los últimos 10 como coordinadora del Equipo Terapéutico, organizando y optimizando los recursos profesionales disponibles.
¿Qué servicios o programas ofrecéis en Llaurant la Llum?
Explicado de forma muy reducida, en la Comunidad Terapéutica ofrecemos un tratamiento residencial a aquellas personas que previamente han intentado un tratamiento ambulatorio en conductas adictivas, y que por diferentes motivos no lo han conseguido. Ofrecemos asesoramiento familiar, así como primeras entrevistas de valoración.
¿Por qué te decidiste a hacer el máster? ¿Qué te impulsó a ello?
Decidí hacer el master, en primer lugar porque es el único acreditado para cumplir las exigencias académicas actuales, y en segundo, porque me pareció interesante para mi formación en el tratamiento de adicciones, que procuro que sea continua y lo más actualizada posible.
Ahora que has acabado el máster, ¿podrías decirnos en que aspectos te ha servido para tu trabajo, que nuevos tratamientos has podido aplicar, etc.?
Para bastantes cosas: compartir experiencias con algunos de los profesionales en este campo que, como yo, han realizado el master. En el ámbito laboral, me ha servido para realizar una buena base de datos y conocer otros recursos de tratamiento residencial, y su forma de trabajo, lo que me ha permitido instaurar lo positivo en mi recurso; también conseguir contactos interesantes para mi empresa.