El uso recreativo de esta sustancia se ha popularizado en todo el mundo como una droga de fiestas y clubes nocturnos por los efectos de euforia y calidez emocional que produce. Y se pensaba que no producía efectos a largo plazo. Pero ahora por primera vez científicos del Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt, en Nashville, Estados Unidos, demostraron que el compuesto está asociado a lo que llaman cambios crónicos en el cerebro. Tal como afirman los investigadores en Archives of General Psychiatry (Archivos de Psiquiatría General) descubrieron que la MDMA produce una neurotoxicidad de larga duración asociada a la serotonina, un compuesto cerebral vinculado a varias funciones importantes. "Nuestro estudio presenta la evidencia más clara hasta ahora de que la droga causa pérdida crónica de serotonina en humanos" afirma el profesor Ronald Cowan, quien dirigió el estudio. La serotonina es un neurotransmisor que juega un papel importante en la regulación del estado de ánimo, el sueño, el apetito y la memoria, entre otras conductas. Estudios pasados han demostrado que el éxtasis tiene un efecto en el cerebro incrementando la liberación de serotonina en las neuronas y aumentando la actividad de este nurotransmisor. Pérdida de serotonina Las investigaciones con animales habían encontrado que al liberar grandes cantidades de serotonina, el uso de MDMA causa una reducción del compuesto en el cerebro que puede tener un impacto conductual negativo. Pero hasta ahora se pensaba que ese efecto era temporal o desaparecía días después de tomar la droga. En la nueva investigación, el profesor Cowan y su equipo utilizaron imágenes de tomografía por emisión de positrones (PET) para examinar los niveles de receptores de serotonina en varias regiones del cerebro de un grupo de mujeres. La mitad de las participantes había tomado éxtasis y la otra mitad nunca había usado la droga. Los receptores son un grupo de proteínas que se activan cuando se libera un neurotransmisor en el cerebro, en este caso la serotonina. Los resultados mostraron que las usuarias de éxtasis tenían niveles más altos de estos receptores y que había una relación directa entre el uso y la dosis que habían tenido de la droga y el nivel de receptores de serotonina. Tal como explica el profesor Cowan, este incremento en los niveles de receptores es una compensación por la pérdida de serotonina, lo cual muestra que el éxtasis causa cambios duraderos en la función de este neurotransmisor. Según el investigador, este hallazgo es importante porque la droga es usada por millones de personas, principalmente jóvenes y adolescentes en todo el mundo. El Sondeo Nacional de Uso de Drogas y Salud de Estados Unidos calcula que en 2010 unos 15,9 millones de individuos de 12 años o mayores habían usado éxtasis en algún momento de su vida, y 650.000 la habían utilizado en el mes anterior al sondeo. "Es realmente crucial conocer si esta droga está causado daños a largo plazo en el cerebro porque millones de personas la están usando" afirma el profesor Cowan. Además, agrega el investigador, la MDMA está ahora siendo probada como tratamiento para el trastorno por estrés postraumático (TEPT) y para combatir la ansiedad asociada al cáncer. Por eso, dice, es necesario entender cuáles son los riesgos y en qué nivel la sustancia se vuelve tóxica. "Nuestro estudio sugiere que si usas éxtasis de forma recreativa, cuanto más uses, más cambios sufrirá tu cerebro" expresa el profesor Cowan. "Es esencial que entendamos el riesgo asociado al uso de éxtasis" agrega. |