Más del 98% de la población asegura tener conocimiento de que fumar
causa enfermedades graves y cerca de la mitad manifestó haber intentado
dejar el cigarrillo en el último año, por lo que la Argentina está en
condiciones de profundizar la reducción de los niveles de consumo de
tabaco que se viene registrando en los últimos años, señalaron
especialistas del Ministerio de Salud de la Nación al presentar los
resultados a nivel local de la Encuesta Mundial de Tabaquismo en
Adultos.
De acuerdo a los resultados obtenidos en el estudio, que se realizó
durante este año, el 22,8% de los habitantes mayores de 18 años fuma,
lo que evidencia un importante descenso frente a la proporción de
fumadores del 27,1% surgida de la Segunda Encuesta Nacional de Factores
de Riesgo (ENFR), llevada a cabo en 2009 por la cartera sanitaria
nacional.
"Gracias a este estudio hoy sabemos que más de 700 mil personas
dejaron de fumar entre 2009 y 2012, y que siete de cada diez fumadores
están pensando en abandonar el cigarrillo. Esto es importante, pero no
menos importante es seguir trabajando para que nuestra sociedad viva
cada vez más sana y mejor. Porque los resultados quizás tardan, pero
llegan", indicó Andrés Leibovich, subsecretario de Políticas, Regulación
y Fiscalización del Ministerio de Salud durante el acto de presentación
de los resultados del sondeo, que se llevó a cabo en la sede de la
cartera sanitaria.
La Encuesta Mundial de Tabaquismo en Adultos –que contó con la
colaboración de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y el
Centro para el Control de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos– se
llevó a cabo por primera vez en la Argentina y fue realizada a 6.645
personas en todo el país seleccionadas al azar. El sondeo, cuyo trabajo
de campo estuvo a cargo del Instituto Nacional de Estadística y Censos
(Indec), releva el consumo de tabaco; la exposición al humo de tabaco
ajeno; la cantidad de gente que dejó o quiere dejar de fumar; diversos
aspectos económicos del tabaquismo; la publicidad de tabaco y, además,
muestra las actitudes y percepciones de la población mayor de 15 años
relacionadas al tabaquismo.
El 48,6% de los consultados dijo haber intentado dejar de fumar en
los últimos 12 meses, mientras que el 73,6% aseguró que planea o piensa
dejar el cigarrillo y el 60,5% manifestó que un profesional le aconsejó
abandonar el tabaco en el último año. Entre quienes intentaron dejar de
fumar, el 89,2% lo hizo sin ayuda, el 3,1% utilizó medicamentos, el 2,8%
recurrió a alguna terapia alternativa, el 2,3% a parches o chicles y el
mismo porcentaje a un servicio especializado.
En tanto, el 98,3% de la población tiene conocimiento de que fumar
causa enfermedades graves y el 92,6% conoce el riesgo que implica
respirar humo de tabaco ajeno, mientras que el 32,9% pensó en dejar de
fumar por las advertencias sanitarias. En relación a la exposición al
humo de tabaco ajeno, el estudio mostró que el 31,6% de los adultos que
trabajan en ambientes cerrados estuvo expuesto, que el 33% corrió la
misma suerte en sus hogares y que 23,2% lo sufrió en restaurantes.
Los no fumadores pueden sufrir graves consecuencias en la salud por
estar expuestos de manera regular al humo de tabaco. Las 7.000
sustancias que contiene el humo del cigarrillo incluyen metales pesados,
componentes cancerígenos e incluso materiales radioactivos que pueden
permanecer en el ambiente hasta dos semanas después de que se ha
ventilado la habitación donde se estuvo fumando.
Mario Virgolini, coordinador del Programa Nacional de Control de
Tabaco de la cartera sanitaria nacional, sostuvo a su vez que "en el Día
Internacional del Aire Puro, es importante recordar que el principal
contaminante de ambientes internos es el humo de tabaco". Además, indicó
que si bien en el país "se vienen efectuando relevamientos sobre el
consumo de tabaco, la Encuesta Mundial de Tabaquismo en Adultos se hizo
por primera vez en Argentina y ya se llevó a cabo en otros 20 países",
por lo que a partir de los resultados se podrá profundizar el
conocimiento sobre la epidemia del tabaquismo a nivel local y comparar
esa situación con la de otras naciones.
El tercer jueves de noviembre se celebra en todo el mundo el Día
Internacional del Aire Puro. Esta fecha fue instaurada en 1977 por la
Organización Mundial de la Salud (OMS) y continúa vigente hasta la
actualidad. Sus principales objetivos se basan en la concientización de
la comunidad sobre la importancia de vivir en ambientes 100% libres de
humo de tabaco y en incentivar a los fumadores a abstenerse de fumar
por, al menos, 24 horas.