Un trabajo advierte de la amplia disponibilidad de "tentaciones" on line lo que obliga a replantearse este terreno de estudio.
La investigación sobre la adicción al juego ha avanzado mucho en los últimos 25 años; sin embargo, las amplias posibilidades que ofrece actualmente el juego "on line" a los ludópatas obliga a replantearse este terreno de estudio y a llevar a cabo investigaciones más innovadoras para hacer frente al nuevo escenario.
Así lo advierte la revista "The Lancet" en una revisión sobre la adicción al juego en la que varios especialistas de la universidad canadiense de Calgary repasan los últimos avances que rodean a esta patología. Según Jon Grant y sus colegas, la amplia accesibilidad "on line" que existe hoy en día, 24 horas al día y sin necesidad de salir de casa (desde casinos hasta apuestas deportivas), obliga a llevar a cabo investigaciones más innovadoras sobre este trastorno para poder trasladarlos cuanti antes al entorno clínico.
La incidencia de la ludopatía en el mundo varía ampliamente de unos países a otros (también en función de los criterios clínicos que se empleen para definir el trastorno), aunque suele oscilar entre el 0,2% y el 5%. Por ejemplo, se calcula que sólo afecta a uno de cada 500 individuos en Noruega frente a uno de cada 20 en Hong Kong; aunque como ellos mismos destacan, el actual panorama digital está dando mayor visibilidad al problema y es probable que las cifras crezcan en el futuro.
El problema de la ludopatía, recuerdan los psicólogos, es que a menudo no es un trastorno único, sino que suele verse acompañado por otro tipo de adicciones y trastornos. Por ejemplo, recuerdan, se calcula que los jugadores patológicos tienen cuatro veces más posibilidades de abusar del alcohol o sufrir un trastorno de la ansiedad, y hasta cinco o seis veces más posibilidades de abusar de otras sustancias estupefacientes.
Sobre las opciones de tratamiento disponibles para estos pacientes, las más eficaces hasta la fecha han resultado ser las de tipo cognitivo conductual; aunque la estadística sobre su recuperación es pesimista ya que sólo un tercio de ellos consigue superar su problema a lo largo de su vida (sólo uno de cada 10 da el paso de buscar ayuda profesional para salir del pozo). Aunque es cierto que en muchos casos esta adicción es episódica y transitoria, admiten los canadienses.
"Nuestros conocimientos [sobre esta adicción] evolucionan en paralelo con la floreciente disposición de oportunidades para jugar a través de la Red. Internet está poniendo numerosas posibilidades de juego a disposición de gente en todo el mundo durante las 24 horas del día", advierten.
Las máquinas tragaperras ya no son la única tentación